
La escenificación de la boda entre ambos ríos ha corrido a
cargo del grupo de teatro Morteduros, de Villarmentero de Esgueva, y ha
congregado a numerosos vecinos atraídos por la originalidad del acontecimiento,
algunos incluso ataviados con trajes de principios del siglo XX, atendiendo así
la invitación de los organizadores.
La boda se enmarca en un programa cultural diseñado bajo
el título “En junio, La Esgueva”, que a lo largo de todo este mes incluye
diferentes actividades literarias, musicales, infantiles y turísticas.
La finalidad de la iniciativa, en la que colaboran las
asociaciones Rondilla, El Refugio, La Unión de Pajarillos, Pilarica, Unión
Esgueva, San Pedro Regalado, 24 de Diciembre y Bailarín Vicente Escudero, es
propiciar lazos de unión entre estos ocho colectivos vecinales, muy vinculados
a La Esgueva, pues baña sus barrios.
Otro de los objetivos de las actividades organizadas es mostrar
a los ciudadanos la potencialidad histórica, cultural y artística que se
esconde tras las riberas del río.
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